SEVILLA sale a especular los partidos. A veces sale bien, y otras...
Ante Liverpool salió bien. Lo esperó, cansó al rival y con el aire fresco de los cambios lo ganó sobre el final.
Ante Forever, salió mal. En el primer tiempo, no se llegó al arco. Se vio un Sevilla que por momentos tocaba el balón, pero no fue punzante en tres cuartos. De hecho no hubo situaciones de gol salvo un tiro libre de Soler. Parecía que en el complemento se arriesgaría y abriríamos el marcador, pero antes de eso vino el gol de Forever que modificó los planes. Cuando se arriesgó se logró el empate. Quedó un sabor amargo porque con lo hecho en el final nos dimos cuenta que teníamos material para ganarlo.
El sábado ante San Marino, misma situación. Sólo contamos un remate de Soler desde afuera que pasó a medio metro del palo. Luego, se le dio la iniciativa al rival, que sólo tiraba pelotazos y no tenía ideas de como entrarle a un Sevilla con mucha gente en defensa y un mediocampo poblado ya que Soler, siendo delantero, debía bajar porque la pelota no le llegaba. Se arriegó faltando 20 y se perdió. No por correr el riesgo, ya que el gol vino de un corner en medio de la supremacía de Sevilla que acorraló a San Marino en su propio arco, y nuevamente quedó la sensación amarga de habernos acordado tarde de pisar el área contraria.
Antes el empate eran el 75 % de los puntos posibles (2/3). Siempre se remarca que Sevilla empató 8 partidos seguidos el año que salió campeón. Pero el reglamento cambió y hoy empatas y te llevas el 33,3 % de los puntos (1/3). Esto demuestra que si se tienen aspiraciones de lograr cosas importantes hay que pensar en atacar para llevarse los 3 puntos. Un empate le sirve a aquel que quiere sumar para mantener la categoría. Si empatas todos los partidos te salvas del descenso seguramente. Pero Sevilla siempre debe aspirar a otros objetivos y mas ahora que hay material de sobra, pese a que la tabla diga lo contrario. Cuando los jugadores y el cuerpo técnico se den cuenta de que nunca en la historia tuvimos un plantel tan rico técnicamente como este, Sevilla va ganar partidos cómodamente. Es cuestión de creer más en lo que tenemos y no salir a jugar respetando tanto al rival.