Sevilla quedó diezmado tras las lesiones de Wojtasik ( desgarro ) y Cequeira ( al hospital). Debió mover una pieza clave, como "tati" Echeverry, quien tuvo que ir de marcador central y dejar el puesto de mediocampista. Ahi se partió. No tuvo la pelota y fue superado por Inter. Todo en medio del primer tiempo. Por primera vez se extraño a Matías Barreras, capaz de tener el balón, hacer una pausa y darsela a un compañero. Así, la única manera de empatar era con un milagro, que no llegó.
Sonara contradictorio, pero si bien extrañamos a Barreras, o a Sánchez, que es un defensor y no hubiese sido necesario mover a "tati", siempre buscamos refugiarnos en las ausencias para justificar el mal juego. Cuándo será el día ,para que los que les toque ingresar, desmuestren que están para rendirle al equipo y dejen de ser jugadores de 20 minutos y pueda haber una competencia por el puesto. Sevilla está mal y cada jugador tiene que mostrar sus mejores condiciones en este momento. Así habría una digna pelea por un lugar en el equipo. La titularidad hay que ganarla con meritos, no con la ausencia de otro. El día que esto pase, volveremos a ser Sevilla.