Sevilla se fue al descanso 0-2 con La Resaka. Parecía que no iba a poder revertir la situación adversa del partido.
Sin embargo, con mucha actitud para ir hacia adelante, primero logró el descuento con un esquisito tiro libre de Lucas Benitez ( el que hizo llorar a Napoli) y sobre el final con un cabesazo cruzado de Garofalo tras centro certero de Arizmendi.
Luego fue en busca de la victoria, pero el tiempo no alcanzó y se tuvo que conformar con un empate que deja un sabor mas dulce que amargo.